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EEUU: Donald Trump y el “uso” de la religión

El gesto de Trump, al acercarse a una iglesia que había sido incendiada durante las protestas que están afectando a varias ciudades del país que preside, y el hecho de alzar la Biblia en la puerta de la misma, ha indignado a muchísimas personas, también líderes religiosos.

El obispo episcopaliano Michael Curry, presidente de la Iglesia episcopaliana de Estados Unidos, a la que pertenece esa iglesia, es uno de ellos. Trump “utilizó un edificio de la iglesia y la Sagrada Biblia para fines políticos partidistas. Esto se hizo en un momento de profundo dolor en nuestro país, y su acción no hizo nada para ayudarnos o curarnos”, ha expresado en un comunicado.

Pero una de las reacciones más airadas y con más repercusión en las redes sociales ha venido de un sacerdote católico. Se trata del jesuita James Martin, que ha calificado de ‘repugnante’ el gesto Donald Trump. “Dejadme ser claro. Esto es repugnante. La Biblia no es un accesorio. Una iglesia no es un fondo para una foto de propaganda. La religión no es una herramienta política. Dios no es tu juguete”.

Los líderes políticos siempre han buscado mover los afectos de sus gobernados y promover comportamientos considerados ‘buenos’ o queridos por el pueblo. Ya sea hacia Dios o fomentando ‘buenas’ costumbres. Desde los faraones y los emperadores romanos hasta nuestros días, los dirigentes siempre han realizado gestos para alentar al pueblo, ya sea de manera cínica o auténtica.

De hecho, no es raro en los últimos años, ver a mandatarios en marchas feministas, del ‘orgullo gay’, o en causas ideológicas progresistas que desean promover o a las que desean sumarse por ser populares entre las masas y ganar sus votos. Que quieren que les diga, entre líderes políticos que con sus gestos buscan suscitar ideas venenosas y destructivas y otros, como es el caso, que intentan alentar sentimientos religiosos o causas buenas -como cuando Trump acudió este año a la marcha por la vida-, me quedo con el segundo.

Además, ¿quiénes somos nosotros para juzgar las intenciones? ‘De internis, neque ecclesia’, dice un viejo dicho de la Iglesia. Juzgar las intenciones con las que se hacen las cosas es atribuirse un papel que ni siquiera la Iglesia se arroga.

James Martin, SJ@JamesMartinSJ

Today is Feast of Mary, Mother of the Church, and today’s Gospel reading is Mary, standing under the Cross, grieving for her son. If you weep over that image, but not for the African American parents who grieve for their brutalized and murdered children, you’re missing the point.

El propio padre Martin, con motivo de la fiesta de María, Madre de la Iglesia, celebrada, publicó en Twitter una foto en la que aparecían una mujer y un hombre afroamericanos posando, con la bandera de Estados Unidos de fondo, en clara alusión a la Virgen María y Jesucristo en ‘la piedad’, al descender de la cruz. “es Fiesta de María, Madre de la Iglesia, y la lectura del Evangelio de hoy es María, parada bajo la Cruz, llorando por su hijo. Si lloras por esa imagen, pero no por los padres afroamericanos que lloran por sus hijos brutalizados y asesinados, te estás perdiendo el punto”, dijo Martin.

“La religión no es una herramienta política”, dijo el jesuita ante el gesto de Trump. En fin, ‘De internis, neque ecclesia’.

Por: Infovaticana

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