La Oficina de Prensa de la Santa Sede informaba esta tarde que el Vaticano empezará a abrir sus puertas el próximo 4 de mayo.
Esta mañana, en el antiguo Salón del Sínodo, ha tenido lugar una reunión extraordinaria presidida por el cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, con la presencia de los jefes de los dicasterios y entidades de la Santa Sede.
El objetivo de la reunión era reflexionar sobre la segunda fase de la emergencia por la epidemia del coronavirus que, según comunica la Santa Sede, comenzará el 4 de mayo.
Durante el encuentro, se subrayó “el esfuerzo” realizado por el Vaticano para “hacer frente a la crisis de manera sostenible”. Además, se decidió la reactivación gradual de los servicios ordinarios, al tiempo que se salvaguardaban las precauciones de salud para limitar el contagio, a fin de garantizar el servicio al Santo Padre y a la Iglesia Universal.