“¿Se queda ya Benedicto en Alemania para siempre?”, se pregunta el Bild Zeitung, el periódico más leído en Alemania. La sugerencia la ha recogido el Huffington Post y ha corrido como la pólvora en redes sociales, donde se habla abiertamente de ‘exilio’.
El Vaticano ha negado dicha opción, y oficialmente es una visita del Papa a su hermano, gravemente enfermo. Sin embargo, el diario alemán se pregunta si regresará alguna vez al interior de las murallas leoninas.
Nuestro blogero Specola señalaba ayer la posibilidad de que eso pasara:
No sabemos las razones últimas que le han empujado a tomar esta decisión pero intuimos que la salud de su hermano es una de ellas pero quizás no la más importante: «Me enfrento a la última parte del camino de mi vida y no sé qué me espera. Sin embargo, sé que la luz de Dios está allí, que ha resucitado, que su luz es más fuerte que cualquier oscuridad, que la bondad de Dios es más fuerte que cualquier maldad en este mundo»
El catolicismo Alemán es mucho catolicismo y no nos podemos quedar con las consignas oficiales divulgadas por la bien mantenida iglesia oficial que solo piensa en sus intereses. No dudamos de que ha pesado y mucho en el Papa Benedicto lo que puede hacer por toda la iglesia y por su amada Alemania en estos momentos y en su situación. Es una pregunta que todos nos tendríamos que hacer, Dios no pide imposibles pero sí posibles y el pecado de omisión también es pecado y pude serlo grave. Veremos que sucede en las próximas fechas pero todo apunta a que esta no es una visita breve y que se quedará una temporada: ‘el tiempo que sea necesario’. Las personas desplazadas y el tipo de alojamiento nos hablan de una residencia estable más que de algo pasajero. La providencia tiene sus tiempos pero pensamos que el Papa Benedicto quiere terminar sus días en su Alemania natal y que aquí quede la tumba de un papa Alemán que dio su vida por la iglesia en tiempos de confusión. Ya no hay dos papas en el Vaticano pero sí hay un papa alemán en la antipapista Alemania. Benedicto sigue siendo mucho Benedicto.
Por: InfoVaticana