Estábamos en 1978. El conocido escritor, y por entonces presentador de televisión Fernando Sánchez Dragó, entrevistaba a uno de los filósofos españoles más influyentes del siglo XX: Gustavo Bueno.
Gustavo Bueno, que murió en 2016, es conocido por haber desarrollado el ‘materialismo filosófico’, siendo conocido también como un ateo confeso.
Por eso llama su atención las declaraciones que dirigió a la audiencia del programa emitido en 1978, cuando Dragó le preguntó sobre la escolástica, una de las fases más importantes de la historia de la filosofía. Dragó le cuestionó sobre ella, ¿qué había sido de ella?, ¿seguía estando presente? Esta fue la respuesta de Bueno:
“Yo creo que sí, es más, yo creo que es una pena que ya no se cultive. Por ejemplo, hace unos años, hace todavía 10 o 12 años, los clérigos que venían a la universidad sabían latín, habían leído a santo Tomás, a Suárez, se podía discutir con ellos. Y ahora, no sé si es por el Concilio Vaticano o por lo que sea ahora no saben nada, ahora no saben absolutamente nada y entonces ni siquiera se les puede atacar. Son tan abiertos, es un humanismo tan vago, tan indeterminado que realmente no hay posibilidad de hablar con ellos. Y en ese sentido, me parece que la escolástica ha perdido su rigor que está sin duda recluido en algunos núcleos, pero que hablan para sí, que no tienen auditorio, pero yo creo que es una tradición como la música gregoriana, que debería cultivarse, el que sea aficionado a ello, porque es una tradición importante, porque es un eslabón cultural sin el cual no se puede entender evidentemente toda la cultura posterior. La filosofía escolástica yo creo que es un eslabón indispensable para entender el ulterior desarrollo del pensamiento”.
Por: InfoVaticana